En el club de los que aspiramos a ser financieramente independientes existe un atajo para calcular cuánto necesitamos para poder vivir de las rentas de por vida: La regla del 4%
Como tantas cosas en el mundo financiero, donde un experto te dice una cosa y otro la contraria, esta regla no está exenta de controversia. Luego te diré por qué creo que puedes ignorar los argumentos en contra, pero déjame que explique antes en qué consiste la regla, por si nunca lo habías oído.
La regla del 4% se llama así porque es el máximo porcentaje de tu patrimonio que puedes gastar cada año si quieres que tu dinero te dure para siempre. Por ejemplo, si tienes un patrimonio de 500.000€ lo máximo que puedes gastar al año son 20.000€ (500.000 x 0,04 = 20.000)
Suena muy bien y es sencillo, pero lamentablemente predecir cómo va a ser tu economía en el futuro es complicado. No sabes qué variaciones va a tener tu patrimonio a merced de los mercados ni qué inflación vas a sufrir a lo largo de tu vida ¿Cuánto va a costar una docena de huevos cuando tengas 70 años 5€ o 50€? Nadie lo sabe.
Las respuestas que puedes escuchar a esta pregunta son de los más variadas. Mucha gente te dirá un número aleatorio entre 5 y 20 millones de euros. Muchos sitios en internet y asesores financieros varios te dirán que depende del salario que ganes antes de jubilarte (asumiendo implícitamente que gastas todo lo que ganas) dando cifras entre 2 y 10 millones de euros.
Sin embargo, la mayoría de los fans del club de la independencia financiera te darán la respuesta que yo creo es la más acertada: calcula tus gastos anuales y multiplícalos por 25. Eso es lo que necesitas tener ahorrado para jubilarte (Ten en cuenta que, al multiplicar por 25, estás usando implícitamente la regla del 4%).
Simplificando mucho la cosa sería así: imagina que tienes tus ahorros para la jubilación invertidos en bolsa y otros activos y que entre los dividendos y el aumento del precio se revalorizan a un ritmo del 7% anual. La inflación se come un 3% de media, dejándote un 4% para poder gastar de forma “segura” para el resto de tu vida.
Casi puedo sentir el revuelo entre muchos de los que estáis leyendo esto ¡Ahorros para la jubilación metidos en bolsa!¡Te has vuelto loco! Así que voy a matizar un poco para que no os pongáis nerviosos.
Como todo lo relativo a los mercados financieros, lo que acabo de explicar es una versión simplificada de lo que podría ocurrir en un mundo ideal. En el mundo real, las acciones suben o bajan cada año y lo mismo pasa con la inflación.
En un periodo tan largo como la jubilación que tú y yo vamos a disfrutar (varias décadas) pueden pasar cosas de una gran transcendencia. Mira lo que ha ocurrido en el pasado: la gran depresión, la guerra civil, 2 guerras mundiales, el abandono del patrón oro, la guerra fría, la crisis de las .COM, etc. Hemos vivido periodos con más de un 10% de inflación y tipos de interés cercanos al 20%.
Más recientemente hemos vivido el estallido de la burbuja inmobiliaria y obra civil, acompañado de una gran crisis financiera y con una caída del precio de la vivienda cercana al 50%. Los efectos de esta crisis los seguimos sufriendo.
Por ejemplo, si te hubieras jubilado en USA en 1921 con tu patrimonio invertido en acciones, habrías experimentado una enorme subida en los primeros 8 años de tu jubilación. Serías tan rico en 1929 que el crash y la gran depresión posterior prácticamente no te afectarían.
Sin embargo, si te hubieras jubilado en las mismas circunstancias a principios del año 2000, hubieras experimentado una caída enorme de tus ahorros con una rentabilidad por dividendo muy baja, de manera que una década después seguirías sufriendo pérdidas.
En otras palabras: la secuencia de burbujas y recesiones importa mucho. En un mundo ideal lo que quieres es jubilarte en un periodo cuando los precios de las acciones están bajos, justo antes de un gran boom. Pero para eso necesitas la bola de cristal y nadie la ha encontrado todavía.
Afortunadamente, varios expertos en libertad financiera ya se han ocupado de hacer el trabajo por nosotros. Estos expertos analizaron que le hubiera pasado a una persona en periodos de 30 años de jubilación (desde los 65 hasta los 95 años) entre 1925-1955, 1926-1956,1927-1957 y así sucesivamente hasta 1995.
Le dieron a este jubilado imaginario un patrimonio consistente en 50% acciones y 50% bonos americanos a 5 años. Después asumieron que esta persona gastaría una cantidad creciente de su patrimonio cada año, empezando con un porcentaje inicial y después indexándolo a la inflación para tener en cuenta el aumento del coste de la vida.
Esta serie enorme de cálculos se conoce como el “Estudio Trinity” y desde entonces sus datos y conclusiones han sido actualizados por Wade Pfau. Este último creó el siguiente gráfico donde se puede ver cuál es el máximo porcentaje sostenible de patrimonio que se puede gastar para varios años de inicio de la jubilación.
Cómo puedes ver el peor caso de todos sería para una persona que se hubiera jubilado en 1966 ya que cómo máximo podría gastarse un 4,15% de su patrimonio cada año (de ahí el nombre de la regla del 4%). Es interesante ver que en muchos otros años este hipotético jubilado podría haber gastado un 5% o más de sus ahorros y aun así dejar un patrimonio creciente a sus herederos.
Esto es una pregunta interesante ya que para el Estudio Trinity el éxito consiste en no arruinarse durante un periodo de 30 años. Pero ¿qué pasa si quieres dejar de trabajar, como yo, mucho antes de los 65 y quieres disfrutar de una jubilación de 40, 50 o 60 años?
Afortunadamente para nosotros, las matemáticas están de nuestro lado y se comportan de manera curiosa: hay poca diferencia entre un periodo de 30 años y un periodo infinito de años a la hora de calcular cuánto dinero necesitas para la jubilación.
Es como la cuota de una hipoteca a 30 años donde al principio casi todo lo que pagas es interés. Disminuye la cuota unos 200€ y de repente ¡tendrás una hipoteca que te llevará literalmente varios cientos de años pagar! En otras palabras, a partir de periodos de jubilación 30 años el número de años que vas a estar sin trabajar influye muy poco a la hora de calcular cuánto puedes retirar de tu patrimonio cada año.
La regla del 4% es usada ampliamente por muchos expertos en jubilación y libertad financiera y yo estoy de acuerdo. Sin embargo, siempre hay gente escéptica que la crítica cuando se lo comentas. Estas son algunas de las quejas más comunes:
Todo esto está muy bien. A pesar de que hay estudios económicos sólidos que pueden desmontar todos y cada uno de los puntos de más arriba, no tengo la paciencia ni las ganas de hacer este post más largo de lo que ya es. Los pesimistas son libres de disfrutar su pesimismo e incluso escribir sobre ello en sus respectivos blogs.En lugar de debatir con los pesimistas voy a contrarrestar los puntos de arriba con estos otros que los dejan a la altura del betún ya que el estudio Trinity se basa en estos supuestos durante la jubilación:
Todo esto es mucho suponer, por lo que la regla del 4% me parece uno de los métodos más conservadores para calcular la cantidad de dinero que necesitas para poder vivir de las rentas.
Para aplicar todo esto en la vida real lo único que tienes que hacer es calcular tu nivel de gasto anual y multiplicarlo por 25 ¡así de sencillo! El resultado es la cantidad que necesitas, como mucho, para poder jubilarte ya ¿Por qué vas a esperar a los 65, 67 o 70 años?
Por ejemplo, una familia como la nuestra que gaste 30.000€ al año (somos 2 adultos y 2 niñas) necesitaría 750.000€ para jubilarse. De todas formas, creo que si nos fuéramos a vivir a un pueblecito alejado de Madrid y nos quitáramos algunos gastos superfluos podríamos vivir cómodamente con 20.000€ al año, entonces “sólo” necesitaríamos 500.000€ o menos para poder jubilarnos ya.
Además, mientras tengas habilidades que puedas emplear para ganar algo de dinero (créeme, las tienes) podría incluso recomendarte retirar un 5% de tus ahorros cada año. Es decir, si puedes apañarte con 20.000€ al año podrías decirle adiós a tu querido jefe con sólo 400.000€ ¿no está mal no?
Ejemplito práctico, imagina estos supuestos:
Según la evidencia histórica, un plan como este solo tendría 45% de probabilidad de éxito. Pero si hacemos los siguientes ajustes:
En este caso la tasa de éxito se eleva hasta el 90%. Si logras ahorrar otros 100 o 200€ al mes tendrías un 100% de probabilidades de éxito, incluso ignorando varios de los puntos que he señalado antes.
Así que no te compliques la vida, la regla del 4% es una buena regla, lo que significa que conseguir 25 veces tus gastos anuales es un buen objetivo en el que fijarte con vistas a la jubilación. Además, puede ser que algunos de tus gastos más importantes vayan desapareciendo (guarderías, alquileres, pagar el coche, etc.) lo que haría las cosas mucho más fáciles, tal y como se muestra en mi anterior post el secreto para jubilarte antes.
"Mucha gente será incapaz de jubilarse y mantener siquiera un nivel de vida de perritos calientes para la cena."